En un partido de
altibajos, la Máquina se impone dos goles a cero, ante unos Rayados que
estuvieron muy lejos de mostrar la gran calidad de juego que le conocemos.
Monterrey empezó
bien, dominó los primeros minutos del encuentro y tocaba el balón en el medio
campo rival mientras que los cementeros, por momentos desesperados, corrían en busca de la posesión del mismo. Así
fue hasta que llegó el primer tanto.
Era el minuto 34
cuando, en medio de una débil actuación por parte de ambas escuadras, los
azules hilvanaron una buena jugada por el costado izquierdo que Elías Hernández
culminó en gol tras un rechace corto del portero. A partir de entonces, los
capitalinos mejoraron su nivel de juego.
La historia de la
segunda mitad fue muy parecida: los de “La Pandilla” salieron motivados y controlaban
el partido, pero Cruz Azul incrustó su segunda diana y, nuevamente, se
intercambiaron los papeles; recuperaron la tranquilidad que les había dado el
primer tanto y tomaron las riendas del encuentro. El equipo norteño se fue
diluyendo con el pasar de los minutos.
Aunque destaca la participación
de Elías Hernández, quien abrió el marcador y puso una asistencia, la calidad
colectiva que exhibieron los azules es simplemente maravillosa. Tocaban,
intuían movimientos de los compañeros, generaban, concretaban: un equipo que
ilusiona para doblete.
Los dirigidos por Pedro Caixinha comienzan a
quitarse algunas cadenas de “los subcampeonatos”, pero los locales siguen con
la maldición del BBVA. ¿Tú ves a estos cementeros levantando el título de la
Liga MX?
Comentarios
Publicar un comentario